Sara Goldberg es gerente de Operaciones de ANII, Agencia Nacional de Investigación e Innovación de Uruguay. Fue entrevistada en el marco del 8° Seminario Taller Prodem realizado en Medellín.
La funcionaria uruguaya fue entrevistada en Medellín por Pablo Ignacio Peralta, Gerente de Emprendimiento de la Agencia Córdoba Innovar y Emprender, quien estaba asistiendo al encuentro organizado por Prodem.
¿Como ves el Ecosistema de Uruguay?
El ecosistema emprendedor de Uruguay tiene todos los actores que debe de tener. Cuando hablas de ecosistema emprendedor hablas de una quinta hélice, es decir cinco alas: el gobierno comprometido con temas de emprendimientos, las universidades, los emprendedores, las empresas que observan posibilidades de generar conocimientos e innovaciones que los startups no ven, y los inversores.
¿Cuál es el estadio en que encuentras al ecosistema uruguayo y en términos relativos respecto del ecosistema latinoamericano? ¿Y comparándolo con el de EEUU e Israel?
No nos olvidemos de que Uruguay es un país chico, con tres millones de habitantes y muy similar a lo que es la provincia argentina de Córdoba en cuanto a habitantes y a su matriz productiva, entonces es distinta a matrices productivas como las de Estados Unidos e Israel, que son mucho más variadas. El ecosistema uruguayo ha crecido mucho en los últimos años, se afianzó y lo hizo de manera sistémica basándose en la confianza y en el conocimiento acerca de donde les duele el zapato a los otros actores, y ayudar a que todos puedan participar; y en tratar de identificar cuáles son las áreas en la que estamos débiles, y lograr fortalecerlas.
¿Cuáles son esas áreas en las que se encuentran débiles y cómo crees que debería ser el ideal para intervenir?
Uruguay cuenta con muchas pre-incubadoras de empresas, algunas que surgen de universidades y otras que no, algunas más sociales o menos sociales, más tecnológicas o no tanto. Estamos bien, formando así una nómina de 12 incubadoras, que se encuentran en un correcto funcionamiento, algunas financiadas por entidades públicas. Respecto de la aceleración de empresas, es decir los emprendimientos que ya facturan y validaron su modelo de negocio, debido a la baja cantidad de emprendimientos que contamos en Uruguay, no tiene sentido una aceleradora, por lo que identificamos afuera los mejores jugadores,¨BestPlayers¨, nos contactamos con ellos y logramos que durante 2017 vengan 500 startups a Uruguay a hacer un proceso de aceleración con 25 startups locales. Este fue un proyecto que costó dinero, y no lo financió todo la ANII sino que fueron distintos organismos y agencias los que aportaron, ya que todos creen que ese es el camino.
¿Como ves el ecosistema uruguayo en un mediano plazo, de 3 a 5 años?
Yo espero que nuestros emprendimientos comiencen a generar más soluciones en función a los problemas que tiene la sociedad o grandes empresas; es decir, que utilicen más las plataformas o los conceptos de innovación abierta, para que comiencen a trabajar en conjunto. No necesariamente grandes empresas, que son muy pesadas para innovar o incluir aspectos o metodologías de sistematización y que les sale muy caro fallar. Trabajando con empresas más ágiles, más rápidas y que conocen qué es lo más nuevo en tecnología, logran adaptar más rápido la innovación. Por otro lado, considero que es necesario contar con una atracción de emprendedores del exterior, porque somos una población pequeña, que no crece como los árboles, sino que tarda y hay que formarnos, capacitarnos, y la semillita del emprendedor cuesta que crezca. Considero importante traer emprendedores de afuera.
El material original puede consultarse en el siguiente Link. Agradecemos la gentileza de Pablo Peralta, autor del artículo.