A través de una reunión vía web donde participaron más de 300 actores de América Latina, se pudo escuchar la voz de emprendedores, oficinas de gobierno, inversores y aceleradoras. Organizado por el Prodem y el BID, el “Mega Hangout” del 21/4 mostró la profundidad del golpe por la pandemia: según la encuesta presentada por Hugo Kantis, el 53% de las firmas no está vendiendo nada, y apenas un 25% de las instituciones es optimista.
El martes 21 de abril se celebró un encuentro virtual que convocó a más de 300 participantes del ecosistema emprendedor de Latinoamérica. La convocatoria, organizada por Prodem y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), en alianza con Global Entrepreneurship Network (GEN), tuvo como origen la crisis global desatada por el virus SARS-CoV-2 y su enfermedad derivada, la COVID-19. El eje de la reunión online residió en las consecuencias que la cuarentena generalizada y los cambios de hábitos están generando entre los emprendedores y las empresas jóvenes de la región.
La encuesta y las necesidades de apoyo
Tras la apertura del facilitador del “Mega Hangout”, Martín Restrepo, perteneciente a Hyper Island, fue el turno de la presentación de la encuesta específica realizada por Prodem para evaluar los daños y las necesidades de los emprendedores, así como la situación de las instituciones de apoyo y demás actores del ecosistema.
En la presente edición de Dinámica Emprendedora, en la sección Producción propia, se brinda una explicación más detallada de la encuesta. Como adelanto, decimos acá que la exposición de Hugo Kantis tuvo las siguientes dimensiones esenciales, a partir de las respuestas de emprendedores y nuevas empresas, por un lado, y de instituciones, por el otro.
Entre emprendedores y empresas jóvenes:
83% sufre un gran impacto en ventas (53% no vende) y 75% en la producción (44% la detuvo)
Sólo un 37% implementó el teletrabajo
La reacción del ecosistema fue lenta o insuficiente (44%) o inexistente (29%)
Entre las instituciones:
2 de cada 3 detuvieron o disminuyeron significativamente su trabajo
Sólo el 25% es optimista con respecto a recuperar pronto su nivel de actividad
Demandas de apoyo
A continuación, en el bloque inicial “Impactos sobre los emprendedores y sus demandas de apoyo”, con coordinación de Kantis, expusieron cinco representantes de diferentes actores del ecosistema: Juana Ramírez (Sohin S.A. y consejera en la Asociación de Emprendedores de México – ASEM), Rodrigo Coquis (Green Tech, de Perú), Sergio Delgado (Red Incubadoras LAT y Fundación da Vinci, de Uruguay), Micaela Bacher (Endeavor, de Argentina) y Marcos Radrizzani (MELI Fund, de Argentina).
Sintéticamente, cada uno de ellos destacó diferentes aspectos, a saber:
Juana Ramírez planteó que el flujo de caja es el mayor desafío. En este sentido, explicó, desde la ASEM se ha pedido al Gobierno fijar un plazo máximo de pago a 30 días para compras del Estado y grandes empresas.
Rodrigo Coquis confirmó los resultados de la encuesta del Prodem, sobre todo en lo que tiene que ver con la baja tendencia de los emprendedores a despedir a sus empleados, dado que a diferencia de lo que ocurre en empresas más maduras y grandes, ellos forman parte de equipo. Y admitió que cunde el desánimo sobre el espíritu emprendedor, que frena la pasión y energía para emprender.
Sergio Delgado enfatizó la dimensión humana, al destacar la importancia de acompañar al emprendedor de cerca, así como la importancia de compartir experiencias para sobrevivir a la crisis.
Micaela Bacher enfatizó la importancia del trabajo en redes y de ser articuladores entre empresas de sectores menos golpeados y que pueden ofrecer apoyo a otros emprendedores de sectores más afectados.
Marcos Radrizzani explicó que para los fundadores es un buen momento para parar la pelota y ver cómo adaptarse a la crisis. Y planteó que en general en América Latina los emprendedores son más resilientes, porque están más acostumbrados a trabajar en escenarios de crisis.
Iniciativas para aliviar y potenciar soluciones
En el segundo bloque, bajo la moderación de Pablo Angelelli del BID, se accedió a las presentaciones de Sara Goldberg (ANII, de Uruguay), Ignacio Gaitán Villegas (iNNpulsa, de Colombia), Julio Carlos Zsolt (FINEP, de Brasil) y nuevamente Sergio Delgado, Micaela Bacher y Marcos Radrizzani.
En resumen, los expositores se concentraron en los siguientes temas:
Sara Goldberg enfatizó la importancia de aliviar a los emprendedores, y de trabajar con ellos codo a codo. La ANII, explicó, no interrumpió los servicios ni las comunicaciones porque estaba lista para pasar a la modalidad online. Y la transición fue rápida. Asimismo señaló que desde la Agencia buscaron ser lo más flexibles posible, y que han dado nuevos plazos para los proyectos, así como que se han aplazado vencimientos de créditos para aceleración e internacionalización.
Ignacio Gaitán Villegas destacó la importancia de responder a la pandemia con acciones innovadoras. Y estableció varios ejes de trabajo, con líneas de créditos blandas, trabajadores independientes y procesos de innovación abierta, a través de retos.
Julio Zsolt planteó la importancia de un enfoque de largo plazo, y de dar el mensaje de que la vida continuará luego de estos tres meses difíciles.
Reflexiones finales
Tras un rico intercambio de preguntas y observaciones con varios de los cientos de asistentes al encuentro virtual, fue el turno de las reflexiones finales, a cargo de Susana García-Robles, de Capria Ventures / LAVCA, y Gonzalo Rivas, del BID.
García-Robles destacó la importancia de rescatar buenas historias de esta crisis. Y enfatizó la importancia de que todos los actores deben tener una mentalidad emprendedora y reinventarse, para un mundo que no volverá a ser el de antes. Los ganadores, según dijo, serán los que se puedan adaptar.
Rivas, por su parte, destacó la importancia de los ecosistemas emprendedores bien formados, con instituciones que han desarrollado capacidades y llevado a cabo actividades que dan cuenta de una reacción rápida para ofrecer iniciativas ante la crisis. Además planteó la dificultad de hacer grandes planificaciones a largo plazo, cuando se requiere de visiones estratégicas que den flexibilidad para sortear la crisis.