Carlos Pallotti, empresario del sector, ex presidente de la Cámara de Empresas de Software y Servicios Informáticos de la República de Argentina (CESSI) y protagonista activo del ecosistema emprendedor en la región. También es miembro del Comité Consultivo de Prodem. Carlos nos brinda acá su mirada sobre el futuro del sector como espacio para la generación de emprendimientos, la función de una entidad empresarial donde conviven diferentes tipos de empresas, y su evaluación sobre algunas políticas de estímulo.
Prodem: El surgimiento del sector de TICs ha estado muy asociado con la presencia de emprendedores y nuevas empresas. ¿En qué medida cree usted que seguirán siendo así?
Carlos Pallotti: Sin dudas las TICs seguirán siendo las grandes generadoras de emprendedores, como lo demuestra la situación en la mayoría de los países. Esto se debe a tres factores. Por un lado, tienen necesidades limitadas de capital para su inicio en proyectos innovadores, y hay disponibilidad de fondos de capital de riesgo para estos fines. En segundo lugar, la difusión de Internet -y también actualmente las redes sociales-, abre amplios espectros de nuevos negocios y oportunidades. Finalmente, está también la alta tasa de rentabilidad que pueden tener estos proyectos, pues con inversiones mínimas pueden obtenerse resultados espectaculares. Estos factores no parece que vayan a cambiar en los próximos años, por lo que con seguridad seguirán siendo la principal fuente de generación de emprendedores y proyectos.
P: Algunos países de América Latina han visto emerger un sector de nuevas empresas de TICs, pero otros no. ¿De qué factores depende ese surgimiento?
CP: Primero, de la existencia de un sistema educativo que pueda generar los recursos humanos calificados, no sólo en los aspectos técnicos, sino también en la gestión de nuevas empresas. Segundo, que haya una cultura emprendedora en esa sociedad, lo cual normalmente viene de la mano de casos de éxito a imitar o de ciertas tradiciones arraigadas socialmente (por ejemplo, no es menor la influencia de las corrientes migratorias que han traído más “cuentapropistas” que trabajadores estables, en manufacturas por ejemplo). Por último, depende del rol que juegan las administraciones públicas o ciertos entes públicos o privados de fomento.
P: ¿Cuáles son los actores clave que podrían contribuir al surgimiento y desarrollo de emprendimientos en las TICs?
CP: Uno de los elementos comunes en todos los países que tienen un fuerte desarrollo emprendedor es el apoyo de diferentes entes. Que no son necesariamente dependientes de las administraciones públicas, o al menos no de manera directa. Entidades empresariales, entes mixtos estado-privado, iniciativas de grandes empresas para apalancar sus negocios o su entorno económico-social, áreas descentralizadas de apoyo y fomento, entre otros, han demostrado ser eficientes agentes de promoción de emprendedores. Por supuesto que la administración pública puede jugar un papel importante para ayudar a planificar, agrupar, usar su propia capacidad de compra o contactos, y aun para la obtención de financiamiento. De la misma manera que las universidades disponen del semillero de proyectos y emprendedores entre sus alumnos, por lo que muchas veces juegan un rol destacado en la concreción de los proyectos y en la colaboración para convertir ideas en proyectos y estos en empresas.
Cuando se alinean dos o más de estos actores en un plan común de promoción, se obtienen sin dudas los mejores resultados, y esto se demuestra en la práctica viendo lo que ocurren en algunas regiones donde nacen emprendedores y empresas diariamente.
P: ¿Cuáles son los sectores de TICs en los que existen mayores oportunidades para los emprendedores que desean crear y hacer crecer una empresa?
CP: Hay áreas con más espacio disponible en la Argentina, como las industrias creativas: videojuegos, de animación musical, animación de imagen, y todo lo que tenga que ver con Web dinámicas o generación de contenido con valor agregado. Los emprendedores deberían tener la oferta más diferenciada posible en el mercado, enfocándose en hacer productos que tengan mayor cantidad de investigación y desarrollo, y que no sean sólo un concepto o un modelo de negocio, sino que atrás tengan todo un desarrollo tecnológico que los haga únicos.
P: ¿Cuáles son los mercados geográficos y verticales para esos emprendimientos de las TICs en áreas creativas?
CP: Geográficamente están sin duda orientadas hacia los mercados centrales, como Estados Unidos, o Gran Bretaña y otras partes de Europa, que son los más demandantes de servicios de mayor valor agregado. Este es el caso de los videojuegos, o una web dinámica con una exploración diferente. En cuanto a mercados verticales, habría que pensar en cierto tipo de negocios orientados hacia el habla hispana, o vinculados con ocio, deporte o inclusive con el agro, mercados que naturalmente son más fácil movilizar desde la Argentina. En otras palabras, es más probable para un emprendedor local lograr éxito sobre algo que tenga que ver con fútbol que si lo quiere hacer sobre béisbol. Por varias razones: primero, porque tiene un campo de prueba local; segundo, porque seguramente van a tener mayor expertise que otros en hacer ese tipo de cosas; y tercero, porque si se posiciona como una empresa argentina, este origen lo va a ayudar en ciertos mercados con los que la gente identifica a la Argentina.
P: ¿Cómo se compatibiliza, desde una Cámara, los intereses de los asociados, que son empresas ya establecidas, con el surgimiento de nuevas empresas que compiten por mercado y recursos?
CP: En una Cámara hay de todo: empresas multinacionales y nacionales; algunas radicadas en Buenos Aires y otras en las provincias; firmas grandes y firmas pequeñas. Un elemento común para todos es que el país tenga un mayor acceso a las tecnologías digitales. Y que socialmente se entienda la importancia de la tecnología en la vida cotidiana. Estos son ejemplos de cosas que les va a interesar a todos los socios, y desde la Cámara se deben reconocer los temas donde todos convergen, y luego trabajan sobre ellos.
También hay áreas en las que se solapan dos clases de empresas, por caso cuestiones sindicales, que seguramente va a interesar a una empresa grande nacional y a una corporación internacional, pero no a una pyme. Y en otros temas, estarán enfrentados unos con otros. Lo importante es que haya un debate con representación plural, y que en la mesa estén sentados los mejores representantes de cada grupo, y todos con una representación equivalente.
Por ejemplo, hay muchos emprendedores o pymes interesados en obtener recursos financieros, pero una empresa multinacional o grande puede estar interesada en temas de propiedad intelectual, o de barreras a las importaciones, o de origen sindical. En la agenda de la Cámara debe haber lugar para todos, de modo que la empresa internacional sepa que, para tratar el tema que le interesa, debe tratar el tema de los otros, y viceversa. En este balance se busca la compensación. Por cada tema de una empresa grande, tendrá que haber 4 o 5 de empresas más pequeñas, tratando de buscar ese equilibrio.
P: Argentina tiene el programa FONSOFT, en cuyo diseño participó el sector privado. Ese programa incluye la promoción de los emprendimientos de TICs. ¿Qué lecciones de interés para otros países surgen de la experiencia de FONSOFT?
CP: Es una buena herramienta que se creó a partir de la Ley de Promoción de la industria del software. Encaró dos grandes iniciativas: una, hacer aportes a las empresas para el desarrollo de productos nuevos o desarrollo de nuevas versiones de productos. Y la otra fue apoyar a emprendedores en el área de las TICs, en especial del software.
La cuestión es cómo las empresas demuestran su viabilidad para que el dinero que les va a facilitar el gobierno, realmente esté en las mejores manos. Es decir, que realmente tengan la capacidad de multiplicar ese esfuerzo. Es importante que el emprendedor que recibe, por ejemplo, 10 mil pesos del Estado logre apalacarlos para que le represente 40 mil. Con este apoyo del FONSOSFT, que son en realidad reintegros, la empresa puede valorizarse y salir a buscar otras fuentes de financiamiento.
El mayor problema que ha tenido el FONSOFT, más allá de una burocracia que no es tan fácil de resolver, es cómo impulsar mayor I+D con las universidades. Porque los instrumentos de este tipo están hechos para que la presentación diga que se va hacer un producto determinado y, en la medida que la empresa lo va haciendo, el Estado va reintegrando el dinero que gastó. Sin embargo, en los procesos de I+D se da primero un avance, luego un retroceso, luego hay que investigar por otro lado, hay que seguir otra línea, etcétera.
P: Cuál sería el mejor camino para cubrir esa falencia?
CP: Debería haber instrumentos orientados para ideas, donde se reconozca que en la mitad del camino una idea determinada puede no tener un resultado feliz porque la tecnología que se quería investigar aún no esta disponible, o porque en el camino de la investigación se dan cuenta de que hay otra rama que hay que investigar. Entonces se debería aprobar un monto máximo para subsidiar un proyecto, y luego, con un seguimiento periódico, se va ajustando el plan de proyecto, de modo que se pueda reformular.